Cada una de estas tiras, tan facilita como parece, me toma un trabajo enorme hacerlas. Por ejemplo, empleo demasiado tiempo poniendo el color a esos detalles de las muchedumbres de muertos. Pero no puedo negar que me gusta hacerlo. Algo tendré, digo yo, de loco que necesita ser amansado y entonces esta tarea, que supongo se asemeja a bordar o hacer mates burilados, primero el diseño y luego cantidad de puntos o artesanía, me aquieta el emprendimiento, la sed de grandes decisiones, el arrebato… Eso tiene su parte buena y su parte mala, qué le vamos a hacer.
También me toma tiempo estar leyendo las crónicas de la época, los sucesos durante el terremoto y el maremoto, lo que ocurrió con la sociedad limeña y chalaca (esta última desapareció), los sucesos que siguieron al terremoto, cómo hubo también un terremoto en el proceso de la identidad limeña y peruana. No me voy a pegar los jamones de que cotejo varios libros, al comienzo arranqué con lo que se puede encontrar en la red, desde Wikipedia hasta otros recuentos y noticias de las crónicas en varios autores. Sumé a eso algunos libros antiguos que tengo de historia, y hasta de periodistas como Ismael Portal, que tenía una columna en El Comercio del siglo XIX, y que da cifras y datos sobre el gran terremoto del siglo XVIII, o las Tradiciones Peruanas de Ricardo Palma, que le da gracia y color a cuanto cuenta, y cuenta también sobre este suceso y sobre la época. Pero, en definitiva, el libro que más de ayuda es «Colonialismo en ruinas», de Charles Walker, editado por el Instituto de Estudios Peruanos y el Instituto Francés de Estudios Andinos, en 2012 (la primera edición fue de la Duke University Press, en 2008). Es excelente para el caso. Ordenado, amplio y ameno. Aun así, y acaso por mi culpa, no doy con las cifras de muertos en Lima (en el Callao son precisas).
Cuando termino las dos tiras semanales, quedo sedado y contento porque ya puedo volver a mi libro sobre el Humor Gráfico en el Perú, y que estoy escribiendo hace meses. Tengo dos escritorios llenos de libros sobre este tema y también varias cuadernas y hojas sueltas con mis apuntes, uno sobre otro, y todos los días me digo que ya los voy a ordenar. Pero sobre esto no voy a extenderme, solo debo hacerlo.
Espero responder con esto a la pregunta de Sandoval. Gracias por sus comentarios.
Impresionante
Con un amigo conversaba sobre este terremoto. Le contaba sobre la minuciosidad de los dibujos, también la descripción y los datos históricos.
La ficción se hace presente, insertando a los personajes, pero es gracias a ellos que puede hacerse el recorrido de lo que ocurrió, como si verdaderamente estuviésemos allí.
Esta no es una historia que se describe a partir de lo que se vive. Esta es una historia que se vive dibujándola y bueno, nosotros, leyéndola.
Juan, estás haciendo un nuevo libro. Felicitaciones.
Puede parecer un publicherry, pero acabo de sacar un librito mio. Es librito, porque es chiquito. Es un solo cuento. Una historia que yo escuchaba hace años en Radio Nacional, pero el programa se interrumpió debido a que iban a transmitir un mensaje presidencial. Viente años después, descubrí el final.
Saludos.
Muchas gracias Juan por los datos
Hola, Baterillero! Gracias. Tienes razón, mientras dibujo esta historieta, me traslado a ese tiempo, siento esos momentos y, créeme, quedo a ratos más desolado de lo que dibujo. Como trato que cada tira tenga algo de humor o suspenso, eso me salva el día. Me quedo mirando como quedó y puedo sentirme satisfecho, por ejemplo, de las líneas de la marea que componen los muertos (suena macabro, pero me refiero al dibujo), pero me siento insatisfecho mirando que me quedó muy limpio, que eso debe haber sido un revoltijo de agua, barro, maderas rotas, paredes tumbadas, muertos con gestos horribles, sangre, y en medio de todo eso algún toque de ternura de una criatura que se salvó, de una buena persona con disposición a ayudar, la solidaridad contra la desgracia.
¿Acabas de sacar un libro, dices? ¿Te refieres a que lo encontraste o lo has editado? En cualquiera de los dos casos, es una noticia a celebrar. Si es lo primero, ¡salud! Si es lo segundo, me anoto, diga usted cuánto y dónde, y me hago de un ejemplar.
Abrazo!
Por nada, sandovAL.
Aparte, ¿qué le pasa al Alianza? Pucha, ese 0-3 contra Cristal… No sigo los partidos, me entero nomás después, y no sé qué pasará en el partido con la «U», están hechos un par de maletas. No entiendo, después de ese partidazo contra Boca… ¡Hay que rebelarnos!
Siempre esta la u para que pague los platos rotos, ademas el torneo de verano es puro bururu
Hola Juan
Es lo segundo. He sido mi propio editor.
La historia va de un cuento que yo escuchaba hace años en Radio Nacional. El programa fue interrumpido debido a un discurso del Presidente de la República. Nunca supe el final. Tarde veinte años en llegar a saberlo.
Saludos
Sí, ya vi ese 2-0. Como dio la noticia un pata en Facebook: «Clásico es ganarte…»
😀
Felicitaciones, Baterillero, por tu nuevo libro.
Vamos sin liquidez, pero tenemos activos (me parece que así se dice en el lenguaje financiero), así que te propongo un canje de libro tuyo por libro mío.
Abrazo!